Las aulas de los colegios siguen vacías desde que se decretó el estado de alarma, a principios de marzo. | Gemma Andreu

TW
123

Los más de 5.000 funcionarios de los servicios generales de la Administración comenzarán desde este lunes la vuelta progresiva a sus puestos de trabajo, algo a lo que se oponen los seis sindicatos presentes en la mesa sectorial reunida este domingo. CCOO, UGT, STEI, CSIF, USO y Sintta denuncian que no se cumplen las condiciones sanitarias mínimas y rechazan la orden «unilateral» de la Conselleria d’Administracions Públiques.

La directora general de Funció Pública, Irene Truyols, se reunió ayer con los representantes sindicales, a quienes comunicó que el proceso de desescalada en la administración comenzará este lunes mismo. Desde esta misma mañana, los respectivos secretarios generales de las conselleries irán llamando a los funcionarios que deben incorporarse a sus puestos y dejar el teletrabajo. El Govern entiende que el inicio de la fase 1 debe ser también el que marque el regreso a la normalidad en la Administración.

Decisión unilateral

Noticias relacionadas

La decisión de vuelta al trabajo se tomó de forma unilateral ya que todos los sindicatos se opusieron. UGT envió un comunicado en el que asegura que ha habido «falta de voluntad de negociación» por parte del Govern. E sindicato considera que la incorporación debía hacerse de manera escalonada a partir del día 18.

Consideran que el protocolo de desescalada de la Administración es «inasumible» por sus generalidades, y porque no aborda ni la situación del personal vulnerable ni medidas de protección claras en los centros de trabajo, ni recoge opciones de conciliación familiar.
También el STEI criticó el protocolo de desescalada «sin unas medidas de protección de seguridad adecuadas» y sin unos protocolos que permitan la conciliación.

«Esta crisis nos ha permitido conocer una manera de actuar de la Administración que no habíamos visto hasta ahora», denuncian. El STEI añade que promoverá acciones para denunciar esta decisión unilateral «que puede poner en riesgo nuestra salud, la de nuestras familias y la de las personas usuarias de los servicios públicos».

Por su parte, la Federación de Enseñanza de CCOO se opone a la propuesta de vuelta al cole para el día 25 de mayo y pide «valentía» al conseller d’Educació, Martí March, para que haga como otras comunidadesy se niegue a precipitar este regreso a las aulas. Aseguran que no se oponen a la vuelta a las aulas, pero piden que se haga cuando sea posible con las condiciones sanitarias adecuadas.