La imagen es del 10 de octubre de 2010 (10-10-10), la fecha elegida por el Govern de entonces para «recibir» las llaves de Son Espases. | Jaume Morey

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El largo litigio en torno a la protección del entorno de la Real y la construcción del Hospital de Son Espases, que arranca de 2004, está a punto de concluir. El Tribunal Supremo acaba de comunicar a las partes que sólo queda la publicación del fallo.

La demanda conjunta de propietarios, vecinos de la Real y de la congregación de misioneros que inició el procedimiento pretende no sólo la anulación de la modificación del PGOU y el Plan Territorial, sino la «ejecución total» de la sentencia favorable del tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB), eso es que declare la nulidad de las licencias del Hospital de Son Espases.

Teóricamente la «ejecución total» supondría la demolición de una obra fuera de ordenación, pero los demandantes ya saben que eso no es posible. Ahora se conforman con «la demolición jurídica», según informaron a este periódico. En definitiva, que estarían buscando una ‘reparación política’ para poner fin a una batalla que tuvo su punto de no retorno cuando el Govern de Francesc Antich acordó reanudar las obras de Son Espases iniciadas por Jaume Matas.