La medida es cautelar a la espera de nuevos análisis que confirmen o descarten la presencia de esa sustancia, un antibiótico que tiene uso terapéutico para las personas, pero cuya utilización está prohibida por la UE desde 1994 para animales destinados al consumo humano.
En un comunicado, fuentes del departamento que dirige Margalida Moner afirman que en las dos granjas afectadas se han tomado muestras de pienso y agua, entre otras actuaciones, para avanzar en la investigación abierta.
Las fuentes recalcan que también se está a la espera de los resultados de otros análisis realizados en una explotación de pollos del municipio de Palma, que también ha sido inmovilizada al haber dado positivo unas muestras sobre la posible presencia de cloranfenicol en algunos animales.
La detección de los dos nuevos casos en Inca y Manacor demuestra, a juicio de la Conselleria, «la eficacia de los controles habituales que lleva a cabo en las ganaderías de las islas», realizados de forma coordinada con la Conselleria de Salut i Consum. La Conselleria recuerda que estas actuaciones se enmarcan dentro del Pla Nacional de Investigación de Residuos (PNIR), que determina la vigilancia y el control de las granjas.
En los últimos meses la Conselleria d'Agricultura ha detectado presencia de cloranfenicol en varias granjas, sobre todo de pollo, lo que ha dado lugar ya a sanciones, entre las que destaca la impuesta a Fontanet por valor de 700.000 euros. Para prevenir el uso de sustancias prohibidas en granjas de animales de consumo humano, el Govern realiza controles periódicos.
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