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Con tan sólo 18 años, la mallorquina Verónica Calabuch Salmerón llega «empujando» muy fuerte en los concursos de belleza. Siempre en los primeros puestos, Verónica se destaca por su transparente y bella mirada. Sus cautivadores ojos de color azul la han proclamado, por segundo año consecutivo con el oficioso título de «miss Ojos Bonitos». Aunque según ella, «no es lo que más destacaría de mí». Discreta y sincera, Verónica asegura que la actual miss Baleares 2004, Marta Lozano, será una excelente representante en el certamen nacional. Para la joven mallorquina el mundo de la moda es algo más que un hooby, y aunque le gustaría estudiar la carrera de Empresariales, no descartaría la oportunidad de irse a una gran ciudad como Madrid o Barcelona para dedicarse en serio a la pasarela, la fotografía o la publicidad. Trabaja como dependienta y éste ha sido el segundo año que se presentaba al certamen oficial de belleza. Es coqueta, detallista y le gusta ir perfectamente combinada y correctamente vestida a cada momento del día o la noche. Su estilo es preferiblemente ir cómoda durante el día y aunque por la noche también hay que ser práctica confiesa que en ocasiones hay que ir más elegante que cómoda.

Le gusta cocinar y sus platos estrella son todos aquellos que tengan como ingrediente principal la pasta, y de ellos la lasaña o los spagueti a la carbonara son sus favoritos.

Confiesa no ir al gimnasio pero sí que realiza ejercicio físico en casa, sobre todo intenta caminar mucho. Tiene pareja. Su novio es el hombre ideal con el cual siempre había imaginado estar al lado.

A pesar de su juventud y de estar de moda en la nueva generación de adolescentes el botellón, asegura no practicarlo y elige, junto a su pandilla o grupo de amigas, tomar un refresco en las terrazas o salir a las discotecas. Le encanta la aventura y una de esas locuras que le subiría la adrenalina sería practicar algún día el «puenting». Para los momentos de ocio elige el séptimo arte. El cine la apasiona y confiesa no ser una consumidora de libros, la lectura no es su fuerte.

Las principales cosas que arreglaría en su ciudad, Palma, sería poner más hincapié y métodos en la limpieza de las calles, sobre todo en barriadas.

Y poner remedio a la inseguridad, otro de los problemas que cada vez más preocupan la juventud, junto a las dificultades económicas para conseguir su primera vivienda, y que hace que vea con cierto pesimismo el futuro.

Verónica Calabuch tiene estilo y desprende mucha clase sobre la pasarela. Destaca su mirada y junto a la desbordante elegancia ambas son sus principales armas en el difícil mundo de la moda.

Valora positivamente el haberse presentado a Miss Baleares y no descarta la posibilidad de hacerlo de nuevo el próximo año.

La amistad es una de las cualidades que, junto a la sinceridad, valora de las personas.

Julián Aguirre