Los estudiantes salieron a la calle en Palma. Foto: J. TORRES.

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Entre el 61% y el 80% del profesorado de los colegios e institutos públicos de Balears secundó ayer la huelga convocada a nivel estatal por los sindicatos contra el proyecto de Ley de Calidad Educativa, según las versiones de la Conselleria d'Educació y la Plataforma en Defensa de l'Ensenyament Públic respectivamente. Además, alrededor de 2.000 personas participaron en la manifestación de protesta contra la citada norma.

Según la Conselleria, el seguimiento del paro contra la norma fue secundado por un 61% de los docentes. Por islas, el mayor porcentaje se dio en Menorca, con un 63%; seguida de Eivissa-Formentera, con un 62%, y de Mallorca, con un 57%, de acuerdo con los datos aportados por el departamento que dirige Damià Pons. La Plataforma elevó el porcentaje de participación casi al 80%, si bien el secretario de Organización del STEI, Gabriel Caldentey, reconoció que el seguimiento fue mucho mayor entre los maestros, llegando al 85-90%, que entre los profesores de Secundaria, donde el porcentaje fue del 60-65%.

En cuanto a los alumnos, el paro afectó a cerca de 55.000 estudiantes en Balears, según la Plataforma. En un ambiente festivo -al compás de la música de flabiols y xeremiesy sin incidentes destacables, docentes, estudiantes, algunos padres de alumnos y representantes de los sindicatos y colectivos integrantes de la Plataforma -STEI, FETE-UGT, FE-CCOO, Sindicat d'Estudiants, CEPC, Escola d'Estiu, FAPA-, así como de los partidos PSOE, PSM y EU, partieron pasadas las 12.00 horas de la plaza del tubo, para recorrer el Passeig de Mallorca, Jaume III y es Born hasta finalizar frente a Delegación del Gobierno. La protesta contó con docentes y estudiantes de la Part Forana llegados en autocares.

Una vez frente a la Delegación, la portavoz de la FAPA, Catalina Esteva, procedió a la lectura de una carta que, posteriormente, se entregó a la delegada del Gobierno, Catalina Cirer. En ella, los convocantes exigen que el proyecto de Ley Orgánica de Calidad Educativa «sea retirado o modificado, porque es segregador, insolidario y penalizador de la enseñanza pública». Entre los puntos de denuncia, el manifiesto apuntó que la ley «recorta la participación de la comunidad educativa en los órganos de gobierno de los centros (...) y supone un retroceso y un ataque al sistema educativo basado en la igualdad de acceso a la educación».