Más de 300 palomas mensajeras volando sobre la Porta Murada de
Santanyí abrieron ayer simbólicamente la Fira d'Octubre de la vila.
El espectáculo de las palomas fue el preámbulo de una jornada muy
animada que contó con la afluencia de más de 5.000 visitantes
procedentes de muchos pueblos de Mallorca. La gran afluencia de
público a la Fira d'Octubre de Santanyí fue valorada muy
positivamente por parte del delegado de Fiestas, Damià Rigo, quien
advirtió que «nuestra Fira aspira a convertirse en una de las más
importantes ferias de toda la comarca del Migjorn, aunque aún
debemos hacer muchos más esfuerzos para consolidarla plenamente».
Aunque el día amenazaba lluvia y de hecho a media mañana llegó a
llover, en ningún caso el mal tiempo deslució los múltiples actos
preparados para la ocasión. Después de la liberación de las palomas
a las 10:30 horas de la mañana, el alcalde, Miquel Vidal y demás
autoridades locales realizaron un itinerario por la Fira. A medida
que pasaban las horas, el ambiente de la feria se fue animando al
ritmo del concierto de música en directo que ofrecieron algunos de
los alumnos de la Escuela de Música de Santanyí, así como de
diferentes grupos musicales.
Una de las calles principales del recinto ferial acogió varias
carpas con múltiples exposiciones de productos locales. La muestra
de los productos artesanales elaborados a partir de la piedra de
Santanyí fue una de las exposiciones que atrajo la atención entre
el numeroso público. La exposiciones de animales centraron la
atención de los más curiosos. Como es ya tradición en la Fira de
Santanyí, El Club Colombófilo del pueblo exhibió una exposición de
palomas que han obtenido algún reconocimiento. Tampoco faltó una
completa y atractiva muestra de perros ibicencos. Además de una
exhibición de perros y palomas, Santanyí contó con una exposición
de ovejas, cabras, cerdos y ponys, que hicieron las delicias de los
más pequeños.
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