El conseller de Presidència, Antoni Garcías, y la de Benestar
Social, Fernanda Caro, presentaron ayer la propuesta de
anteproyecto de ley de parejas estables, que en próximas semanas
estará a exposición pública. Esta ley es la primera que sobre esta
materia se redacta en Balears y, según Garcías, «da respuesta a las
demandas sociales, cumple el compromiso del Pacte de Progrés y
llena un vacío legislativo».
La directora general de Menores y Familia, Aina Radó, explicó
que la ley entiende por pareja estable «la unión de dos personas,
de forma libre, pública y estable (...)» durante un mínimo de diez
años o con descendencia común. Uno de los aspectos más polémicos de
este proyecto se refiere a la posibilidad de que los miembros de la
pareja puedan adoptar conjuntamente «bajo el criterio del superior
interés del menor». Lógicamente, apuntó Caro, esta ley sólo regula
la posibilidad de adopción de forma conjunta, no la adopción en sí,
pues ésta se regula desde los consells insulares. Al hilo, Garcías
apuntó que aunque la presidenta del CIM se oponga a las adopciones
por parejas homosexuales, «si la ley se aprueba, cuando se cumpla
el interés del menor, se deberá aprobar».
Munar, por su parte, reconoció ayer estar «muy satisfecha» con
el texto y dijo no cree que existan problemas para su aprobación.
Sobre las adopciones por parejas homosexuales reiteró que «debe
primar el interés del menor» y recordó que esa idoneidad la deciden
los Consells.
Asimismo, el texto contempla la posibilidad del pago de una
pensión periódica, siempre que la convivencia haya disminuido la
capacidad del solicitante para obtener ingresos o que le
mantenimiento de los hijos comunes impida o dificulte la
realización de actividades laborales. Se regula el régimen
sucesorio y el tratamiento fiscal de la pareja estable se equipara
al de los cónyuges.
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