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El PSM-Entesa Nacionalista de Mallorca afronta este fin de semana, en la Escola d'Hoteleria de la Universitat de les Illes Balears (UIB) su decimoquinto congreso con la voluntad de consolidar un proyecto político que, además de ser el referente del nacionalismo progresista en las Balears sea capaz de constituir en su entorno una mayoría social amplia que permita consolidar el nacionalismo en las islas.

Mateu Morro, secretario general del partido, fue el encargado de presentar ayer el informe de gestión, que fue aprobado contando con dos abstenciones, a los 279 delegados que participan este fin de semana en el congreso y antes del inicio de los debates de las ponencias políticas y de organización, a las que se han presentado 50 y 21 enmiendas, respectivamente. «El PSM es una pieza clave y decisiva para cualquier mayoría. Tenemos peso electoral y capacidad de decisión», apuntó Morro.

El PSM propone apostar por una fórmula que permita representar a «la mayoría social», según Morro, y aboga por seguir trabajando en favor de un Pacte de Progrés que creen positivo.

En su presentación del informe de gestión Morro recordó la dimisión de Joan Mayol como conseller d'Agricultura del Govern y de Cecili Buele como máximo resonsable de Cultura del Consell de Mallorca (CIM), «son decisiones que se toman de forma unitaria, tras un debate interno», apostilló el secretario general.

En la rueda de prensa posterior a la presentación del informe de gestión Morro, acompañado por Joan Antoni Salas y Pere Sampol, criticó la actitud del Gobierno de Aznar con Balears. «Nosotros tenemos el deber de defender los derechos de los ciudadanos. No estamos de acuerdo para nada con la penalización que el Gobierno del PP somete a nuestras islas, porque no penalizan al Govern, penalizan a los ciudadanos», dijo Morro y añadió que, a pesar de todo, están de acuerdo en intensificar la vía del diálogo con Madrid.