Durante 27 horas, Álvaro estuvo encima de la moto y recorrió 730 km. de un tirón, marcando dos nuevos récords a nivel mundial. Fotos: Julián Aguirre .

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Muchos le ven como a un «loco» de las motos acuáticas pero su afición va mucho más lejos. Para Àlvaro de Marichalar y Sáenz de Tejada tener una moto de agua entre las piernas es aventura, riesgo, contacto con la naturaleza, un reto personal, su hobby y una forma de apoyar a la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción.

El pasado jueves marcó dos nuevos récords mundiales, de los seis que ha obtenido desde 1982, al realizar una distancia de 800 millas (1.400 kilómetros) en una sola singladura (Mallorca-Cerdeña-Mallorca) y al batir una nueva marca mundial navegando en mar abierto.

"¿Ha sido la experiencia más dura?
"Ha sido una travesía difícil y muy dura, pero no la que más. Recuerdo tres experiencias muy fuertes, como aquel 13 de noviembre entre Canarias y Bilbao, donde perdí a un buen amigo. En otra ocasión fue la niebla, era en la ruta entre Sevilla y Génova, aquello fue un milagro llegar al final. También en una jornada entre Sevilla y Lisboa lo pasé fatal.

"Y, ¿aún quedan ganas de volver a realizar otra aventura?
"Por supuesto, en mis venas sólo tengo sangre aventurera. Mi sueño es cruzar el Atlántico.

"Muchos pensarán que esto es darte un paseo, vivir del cuento y divertirte, ¿es cierto?
"La verdad es que las personas que viven o llevan dentro el mar pueden entenderme. Desde el principio hasta el fin es una arriesgada aventura, además de un reto personal, aunque mucha gente no lo entiende y no lo valoran.

"¿Cómo te preparas para realizar estas hazañas?
"Es importante estar en plena forma física y entrenar con la moto continuamente, pero más importante es prepararte mentalmente pues en alta mar te puedes volver loco. Yo incluso he llegado a llorar, sudar sangre, pasar mucho frío, calor, etc. Es un contacto continuo con el agua.

"¿Quiénes te apoyan?
"Los verdaderos amigos. Tengo especial cariño por una persona que ha sido como mi padre, ayudándome, aconsejando, en fin todo, me refiero a Marcial Sánchez. Y también a los spónsors que han posibilitado estos dos récords.