Dos niños se han subido a la estatua de Fray Junípero tras ser derribada. | Twitter

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Suma y sigue: el sábado por la noche otra estatua de fra Juníper fue derribada por unos cincuenta activistas indígenas de todas las edades en el Parque Father Serra en el centro de Los Ángeles tras una invocación al espíritu de sus antepasados. La imagen de bronce fue arrancada de su pedestal con cuerdas a los gritos de «¡Derríbadlo, abajo». El golpe dañó la cabeza del santo.

El suceso se registró apenas 24 horas después de que otra estatua del santo mallorquín fuera derribada en San Francisco por un centenar de personas.

El movimiento social e institucional para retirar las estatuas del evangelizador mallorquín y otras de conquistadores o confederados de la guerra civil norteamericana está calando en Estados Unidos. Mientras, en Mallorca, crecen las reacciones de apoyo y reconocimiento a la figura del santo petrer.

Si la Comisión de Arte de San Francisco ya aclaraba el sábado que este tipo de monumentos deberían ser retirados y contextualizados en otros espacios públicos, ayer fueron el alcalde de la ciudad de Ventura, Matt LaVere, y el padre Tom Elewaut, de la Missión indígena Tumamait-Stenslie, quienes promovieron la retirada de la estatua de Juníper situada frente al Ayuntamiento de esta ciudad. «Hemos escuchado las peticiones y creemos que ha llegado el momento de que la estatua sea retirada y trasladada a un lugar no público más apropiado» para «evitar actos vandálicos».

Esta es una de la múltiples reacciones que se suscitan ahora contra Juníper Serra en una campaña por derribar sus estatuas. El legado del santo petrer ha estado en el ojo del huracán desde hace décadas, ya que nativos americanos lo culpan de infligir «brutales castigos» a los indígenas que trataron de escapar a su evangelización en tierras californianas.

Reacciónes en Mallorca

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Bartolomé Tumi Bestard, excónsul de los EEUU y presidente de la Associació d'Amics del Pare Serra, calificó de «desgraciados» los hechos sucedidos en San Francisco y subrayó que «al menos es la tercera vez que ocurren ataques similares, que yo recuerde, uno de ellos el año pasado. La verdad es que estoy muy triste y disgustado».

Bestard realizó gestiones para que este verano Felipe VI visitara Petra para conocer la figura de Fra Juníper Serra, «pero ante esta situación, y así como están los ánimos, veo muy difícil que venga por las reacciones en contra que pudieran producirse». Sobre la retirada de la estatua de Serra en la ciudad de Ventura, el excónsul considera que «al menos es un alivio porque no la dañarán».

Por su parte, el alcalde de Petra, Salvador Femenies (PI), declaró encontrarse «atónito» ante el derribo de la estatua en San Francisco y la decisión de la ciudad de Ventura. «No hay razón histórica, es una incongruencia, como lo han sido los ataques a las estatuas de Colón», afirmó a este diario ayer. «Fue un defensor de la cultura indígena y no creo que el ataque a su figura tenga nada que ver con los sucesos relacionados con George Floyd ni con el racismo en general».

Femenies, que dijo haber recibido varias muestras de pesar por los hechos de vecinos de Petra, criticó algunas opiniones vertidas en las redes sociales, como las de Sonia Vivas (Podemos) en las que llamaba a realizar una acción similar con la figura del santo que se encuentra en Palma.

El Ajuntament de Petra hará este lunes una declaración de repulsa que contará, según Femenies, con una mayoría de votos a favor, «aunque quizá haya alguna abstención de la oposición».

Si el sábado reaccionó, Vox en apoyo de Juníper, este domingo también lo han hecho PP y Cs de Balears.

Reacción española
José Manuel Rodríguez Uribes, ministro de Cultura, ha dicho este domingo que «resulta incomprensible el ataque a las imágenes de Cervantes, fray Junípero Serra o tantos otros. La razón es siempre razón histórica, contextualizada. Lamento y condeno este revisionismo pueril, simplificador y dogmático. Pena. Mucha pena».