Uno de los autobuses israelíes atacados ayer en la ciudad de Beersheva, en el sur de Israel. Foto: B. LINSLEY/AP

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MIGUEL F. ROVIRA-BAGDAD
La matanza fue anunciada por medio de una página de internet, en la que además el grupo autodenominado «Yeish Ansar Al Suna» (Ejército de los partidarios de la Sunna), colocó imágenes de los cadáveres, y una declaración de su brazo militar en la que se atribuyó la decapitación de un nepalí y la ejecución de otros once. «Hemos llevado a cabo la sentencia de Dios contra doce nepalíes, que vinieron de su país para combatir a los musulmanes y para servir a los judíos y los cristianos ... que creen en Buda como su Dios», indicó el grupo de fanáticos en su comunicado.

Las imágenes, según el canal de televisión qatarí «Al Yazira», que aseguró haberlas contemplado, mostraron como un individuo con el rostro tapado y vestido con indumentaria militar, degollaba con un cuchillo a un hombre extendido sobre el suelo. También la filmación de cuatro minutos de duración contenía imágenes de un supuesto militante que ocultándose el rostro con un pañuelo mostraba ante la cámara un cabeza humana, y de varios cuerpos ensangrentados.

Los nepalíes, contratados en principio por una empresa jordana para trabajar de cocineros y asistentes, desaparecieron el pasado 19 de agosto poco después de cruzar en dos vagonetas la frontera con Jordania.

Personal de seguridad
El grupo de nepalíes salió de su país a principios de agosto con la promesa de que iban a trabajar en Jordania, aunque finalmente fueron trasladados a Irak, donde un elevado número de conciudadanos forman parte del personal de seguridad de las empresas extranjeras.

Al día siguiente, y también por medio de una página en internet, «Yeish Ansar Al Suna» anunció que estaban en su poder, y exigió al Gobierno de Katmandú que dejara de enviar trabajadores a Irak. El pequeño y poco desarrollado reino de Nepal rechazó la petición de Estados Unidos para que enviara tropas a Irak.

«Yeish Ansar Alk Suna» es uno más de entre los muchos grupos integristas o insurgentes que han surgido en el país desde la caída del régimen de Sadam Husein, y que secuestran a los extranjeros como parte de su lucha contra las tropas estadounidenses. «Vamos a eliminar cualquier agente, traidor y espía», añadió el grupo en su mensaje.

Cerca de cien extranjeros, la mayoría de países musulmanes, han sido secuestrados en Irak desde el pasado abril por diversos grupos vinculados con la resistencia y organizaciones integristas como es la encabezada por el terrorista jordano Abu Musab Al Zarqaui, ligado a la red Al Qaeda. De entre ese centenar de secuestrados, al menos 18 permanecen en manos de sus captores, otros 23 han sido asesinados, dos continúan desaparecidos, otros dos escaparon de sus secuestradores y el resto fueron liberados o rescatados.