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La violencia se ha recrudecido en Irak a pocos días del primer aniversario del inicio de la guerra, el 20 de marzo de 2003. Al atentado suicida perpetrado el miércoles se unen los incidentes violentos de ayer en Bagdad, en que murieron dos soldados estadounidenses y cinco iraquíes, y la de cuatro personas a causa de un coche bomba que estalló por la tarde en un hotel de Basora.

En la noche del miércoles, un kamikaze se estrellaba con un coche bomba contra un hotel de Bagdad, el Ejército estadounidense indicó que la explosión dejó 17 muertos, revisando así a la baja el balance anterior de 29 fallecidos. Sin embargo, el Ministerio iraquí de Interior difundió un balance de siete muertos.

Al menos cuatro personas murieron ayer al estallar un coche bomba junto a un hotel de Basora. Los bomberos intervinieron para despejar los restos del vehículo. Además, tres empleados de una televisión local vinculada a la coalición murieron y otros diez resultaron heridos cerca de la ciudad de Baaquba. Dos hombres armados abrieron fuego contra el autobús que les transportaba, informaron fuentes hospitalarias.

Poco antes, dos civiles iraquíes resultaron heridos por una explosión tras un ataque con cohetes contra una comisaría de Policía de Baaquba. El Ejército estadounidense no tiene constancia del incidente denunciado por el canal de televisión «Al-Arabiya», que denunció la muerte de uno de sus periodistas a manos de las tropas norteamericanas.