Carme Moreno y Feliu Renom firman texto e ilustraciones de 'L'elefanta que volia ser mare' (Salvatella), que presentan este jueves en Espai Caramulls de Palma. | R.C.

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A los 32 años, Carme Moreno fue diagnosticada de menopausia precoz, por lo que «tenía una gran incapacidad para quedarme embarazada con mi material genético». «Cuando nació Aina sentí la necesidad de contarle sus orígenes, pues siempre he creído en la sinceridad y como los libros son una herramienta muy poderosa de transmisión de ideas y de valores, opté por escribir un libro», recuerda, pero no fue hasta que cumplió 2 años que «empecé a guionizar la historia». El resultado es L’elefanta que volia ser mare (Salvatella Editorial), que presentarán este jueves en Espai Caramulls (Palma) a las 18.00 horas y en la tienda Moraduix de Inca el 20 de abril.

El cuento, ilustrado por Feliu Renom, narra la historia de U y Nil, una pareja de elefantes que viven en la sabana africana. «Deciden irse a vivir juntos y quieren tener criaturas, pero no pueden. Un día conocen a Bel, un búho que les invita a emprender un viaje para conocer más detalles sobre la vida. A partir de este viaje conocemos la forma de reproducirse de variedad de especies, como las ranas o las flores. Bel les propone reunirse con el consejo de búhos y con ellos llega a la conclusión de que tal vez si buscan otra elefanta le podrá dar un óvulo a U y, si se lo implantan en su matriz, puede que por fin consiga ser madre. Y se ponen manos a la obra y encuentran a Margalida que se ofrece a ayudarles encantada. Finalmente, U tiene una elefantita que se llama Negra», resume la autora.

En cuanto a Feliu Renom, señala que pensó en él para este proyecto porque «es un gran dibujante, muy preciso, rápido y original». «Para él supuso un reto porque nunca había hecho obra infantil, aunque para mí también lo fue», reconoce. «Su contribución a nivel de texto también es importante porque me dio una serie de consejos y pautas para que el libro tuviera un carácter más didáctico», añade.

«El cuento es un grito a la vida y a la belleza por las imágenes, explosivas y preciosas de Feliu. Habla del control que a veces los mayores queremos tener sobre la vida y manda el mensaje de que uno puede ser feliz sin hijos. Asimismo, aparecen otros temas como el deseo y la generosidad. Además, hemos intentado que el lenguaje sea más neutro», detalla. En resumidas cuentas, «es un cuento didáctico e interesante para hijos y padres que tal vez pasan por una situación similar».