Las obras opticinéticas están realizadas en acero corten, miden 2,20 metros de alto por dos de ancho, y pesan, cada una, 400 kilos.  | P. Pellicer

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El tech esculptor mallorquín Lolo Garner entregó al rey Felipe VI en 2021 una obra opticinética de su rostro. Obsequio, aceptado por Patrimonio Nacional, que se instaló en los jardines del Palacio de Zarzuela, en Madrid, justo donde está el mástil con la bandera y las visitas se hacen las fotos oficiales.

Ante tal aceptación, por parte de Casa Real, Lolo Garner se puso de inmediato a trabajar en otra obra con el rostro de la reina Letizia, también en acero corten y de las mismas medidas que la del Monarca, 2,20 metros de alto y dos de ancho, con un peso de 400 kilos. Obra que el pasado sábado el artista entregó a don Felipe, después del acto de entrega de trofeos de la 41 edición de la Copa del Rey Mapfre de vela, en Ses Voltes.

La escultura de doña Letizia se instalará también en los jardines de La Zarzuela, frente a la de su marido. «Todo comenzó porque quise hacer una obra relevante que diera frescor y con una perspectiva diferente, aunque mis obras son de un formato mucho mayor como la que se está construyendo para República Dominicana. La característica de este trabajo es que se puede ver desde una cuarta dimensión, o sea desde dentro de la obra y formar parte de ella». Por otro lado, hasta la ciudad del Vaticano viajó recientemente una obra de Lolo Garner para el papa Francisco que le entregó personalmente el padre Ángel.