La Orquesta Sinfónica de Baleares ha protagonizado un concierto protesta en Cort contra los recortes que están sufriendo. | Joan Torres

TW
22

«¡Orquesta, orquesta, orquesta!». Vítores reparadores para los setenta músicos de la Orquestra Simfònica de Balears que ayer llevaron sus instrumentos hasta la plaça de Cort para ofrecer un concierto-protesta contra los recortes que Cort y el Consell de Mallorca quieren aplicar a su presupuesto y que «hacen inviable la supervivencia» de la formación.
El número Les Torèadors de la ópera Carmen, de Bizet, abrió este breve recital que contó con el respaldo y los aplausos de más de 200 personas. Dirigidos por Agustí Aguiló, también miembro de la Simfònica, los músicos emocionaron a muchos curiosos que pasaban por Cort y que se sumaron a la causa. Soldado de Orange, de Rogier van Otterloo, o La boda de Luís Alonso, de Giménez, completaron este reducido repertorio que terminó con una gran ovación y con bises. El popular movimiento de Les Torèadors volvió a levantar a quienes rodeaban esta protesta y, al finalizar, caras de satisfacción entre los músicos que seguirán saliendo a la calle. «Estamos muy contentos. El próximo concierto será el 24 de marzo, a las 12.00, en la plaça de Cort, y el siguiente, el 31», explicó Carlos Fortea, presidente del comité de empresa de la Simfònica, quien aseguró que, de momento, ninguna institución se ha puesto en contacto con ellos tras anunciarse esta protesta. Fortea avanzó que preparan también conciertos de cámara simultáneos en Palma, aunque aún no hay fecha.
Ayer a las 20.30, actuaron en el Auditòrium.