Archivo - Decenas de personas durante una manifestación por la recuperación de la semana laboral de 35 horas para los funcionarios de la Administración madrileña, a 18 de mayo de 2023, en Madrid (España). | Ricardo Rubio - Europa Press - Archivo

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Los sindicatos CC.OO., CSIT Unión Profesional y UGT Servicios Públicos de Madrid reclamarán este miércoles, a las 12 horas a las puertas de la Consejería de Presidencia, Justicia y Administración Local, en la Plaza de Pontejos, la recuperación de las 35 horas laborales para los empleados públicos de la región.

«La negativa del Gobierno madrileño, presidido por Isabel Díaz Ayuso, de mejorar las condiciones laborales de estos trabajadores es un desprecio a los más de 180.000 profesionales que garantizan los servicios públicos para la ciudadanía madrileña», indicaron en un comunicado conjunto.

Los sindicatos piden la devolución de una jornada máxima de 35 horas, «arrebatada» hace más de una década y que ya está implantada en casi todas las comunidades autónomas, así como la implantación generalizada de la carrera profesional y el complemento por reconocimiento del «talento» para todos, y que la Administración «ha otorgado de manera unilateral a sus elegidos, con hasta 15.000 euros anuales, de forma poco ecuánime y parcial».

Sin embargo, durante los Desayunos Madrid, organizados por Europa Press, la consejera de Economía, Hacienda y Empleo de la Comunidad, Rocío Albert, afirmó que esta petición «no la consideran fundamental porque ya tienen mucha flexibilidad».

«Es verdad que no es en todos los sectores, pero en algunos casos pueden teletrabajar o flexibilizar su trabajo», apuntó Albert, quien, además, recalcó que es «mucho más importante» la carrera profesional de los funcionarios.

La protesta de este miércoles es la primera de las que realizarán CC.OO., CSIT Unión Profesional y UGT Servicios Públicos de Madrid. Los sindicatos defienden que estos profesionales, «garantes de los servicios públicos», tienen «serias dificultades» para desarrollar su trabajo por «la falta estructural de recursos humanos y materiales y por el altísimo coste de la vida en la Comunidad de Madrid».