Mar Murcia, ortodoncista de Juaneda Dental Kids.

Las ortodoncias son hoy unos dispositivos de alta precisión y calidad que pueden solucionar problemas de maloclusión en los niños pequeños y en los adolescentes. Mar Murcia, ortodoncista de Juaneda Dental Kids, explica las claves de estos tratamientos.

—¿En qué situación un niño puede requerir una ortodoncia?
—La ortodoncia está indicada en niños cuando los maxilares, que son los huesos de las mandíbulas, no encajan uno con otro, el superior con el inferior; tanto transversalmente, a lo ancho, que es lo más común, cuando hay una comprensión maxilar, es decir, que la parte de arriba es más pequeña, que la de abajo, o la de abajo está más afuera que la de arriba. En esos casos es muy aconsejable tratar pronto este tipo de problemas.

—¿Qué es más habitual, que los padres detecten el problema, o que un odontopediatra lo detecte en una visita de control y lo derive al ortodoncista?
—Lo más habitual es que el niño haya pasado primero por el odontopediatra, que es quien nos remite al paciente cuando ve que se produce esa maloclusión. Una vez detectado el problema hay que tener en cuenta que hay ciertas maloclusiones que es mejor tratar pronto, en la infancia, y hay otras que sabemos que existen pero es mejor que se traten en la adolescencia, por lo cual en ocasiones hay que decirles a los padres que esperen al momento justo de tratar al niño.

—¿Qué tipos de ortodoncia hay?
—Hay muchos tipos de ortodoncia. La ortopédica, que es la que se utiliza en el periodo infantil, es con la que se trata las maloclusiones óseas. En estos casos hay que tratar pronto, cuando aún hay crecimiento en el niño y podemos jugar con ese proceso. Otro tipo de ortodoncia es la fija, es decir, los brakets convencionales, que está más indicada para el periodo de la adolescencia. En tercer lugar, está la ortodoncia invisible, que se puede utilizar tanto en niños como en adultos.

—¿Son molestos los dispositivos de ortodoncia que hay que llevar en la boca?
—No. En la actualidad la ortodoncia no genera esas molestias que podían darse antes. Los dispositivos actuales, con la tecnología moderna de alta precisión, son muchísimo más ligeros, mucho más fáciles de llevar y cómodos. Es verdad que los primeros días en los que se ejercen las fuerzas en los maxilares o en los dientes pueden tenerse unas ligeras molestias, pero no son más allá de dos o tres días. Es algo que pasa y con lo que se convive perfectamente.

—¿Algún consejo para esas pequeñas molestias?
—Siempre que ponemos una ortodoncia entregamos el ‘kit de supervivencia’ que contiene la cera, por si hay alguna rozadura, aunque actualmente los aparatos son muy romos y muy poco molestos. De cualquier modo, siempre hay pacientes que son más propensos a tener llaguitas, por lo que les entregamos todo lo necesario para esos problemas. Lo que hay que hacer es aguantar un poco, dado que estas molestias se pasan en seguida.

—¿Cuánto tiempo se tiene que llevar una ortodoncia, cuánto tiempo puede durar este proceso?
—El tiempo que se ha de llevar la ortodoncia depende de la patología, de la maloclusión que tenemos que tratar. Puede ser necesario prolongar el tratamiento desde seis meses, aunque en algunos casos pueden ser únicamente tres, hasta dos o incluso tres años, dependiendo de la gravedad de cada caso.

—¿Es especialmente importante la higiene dental mientras se lleva ortodoncia?
—Es muy importante. Hay que hacer un buen cepillado diario, varias veces al día, tanto sean fijos o removibles los aparatos que se hayan colocado.