Imagen del expresidente de la Federación Balear de Boxeo Jorge Sánchez. | Facebook

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La directiva de la Federación Balear de Boxeo ha roto su silencio tras ser suspendida a principios de mayo. El que fuera presidente en funciones, Jorge Sánchez, y su padre y exdirigente Manuel Sánchez guardan discreción sobre el proceso judicial que se mantiene abierto y aseguran que dan por cerrada su etapa en la territorial, pero también quieren exponer una serie de lagunas que observan en el proceso de nombramiento de la actual junta gestora. Señalan que su suspensión sin respetar la presunción de inocencia consumó una revancha del anterior equipo de la conselleria y la Federación Española en la que detectan una serie de situaciones llamativas que han querido trasladar al Govern en esta nueva etapa con Joan Antoni Ramonell al frente de la dirección general.

«Mi percepción es que la conselleria no intervino la Federación Balear de Boxeo sino que se la entregó a unas personas que no pertenecen a ningún estamento, uno de ellos ni siquiera residía en la Isla y en los últimos años competía en los Campeonatos de España compitiendo por Castilla y León en lugar de hacerlo por Baleares», apuntan en alusión a la designación de Youba Sissokho junto a Andreu Tomàs, que fueron las personas designadas por Esports para coordinar la reconstrucción de la territorial, además de tener el cometido de activar el proceso electoral que debe marcar un punto de inflexión en esta nueva etapa a partir del año 2024

Jorge y Manuel Sánchez lamentan que los antiguos gestores del deporte del Ejecutivo autonómico no les dieran la opción de defenderse de las acusaciones que se formularon contra ellos y que se adoptaran las medidas cautelares contra los directivos sin ni siquiera abrir un expediente. En este sentido lamentan que no se haya tenido en cuenta la presunción de inocencia como si sucede en los Tribunales. «Sorprende que la jueza no haya tomado ninguna medida cautelar contra ningún miembro de la junta directiva y sí las tomara la conselleria», afirman.

Uno de los aspectos que les generó sorpresa desde un primer momento es que «se nombre a un administrador cuya intención es presentarse a las próximas elecciones». No en vano señalan que la suspensión pesó sobre la directiva pero no sobre la asamblea de la Federación Balear de Boxeo, a la que observan que no se ha tenido en cuenta a la hora de dar forma al período de transición hasta los próximos comicios. Además, sostienen que tanto a nivel deportivo como electoral y económico la situación de la territorial era buena. «Nuestros estatutos reflejan que en el caso de desgobierno de la Federación, se formara una junta gestora de entre los miembros de la asamblea que es soberana. Es curioso que la conselleria no lo permitiera y se saltara al Tribunal Balear de l'Esport que pensamos que es el que debería haberse hecho cargo del asunto», analizan.

El expresidente y exvicepresidente fueron suspendidos por parte de la conselleria d’Esports a principios de mayo a raíz de una investigación de la Unidad Contra Redes de Inmigración y Falsedades (UCRIF) de la Policía Nacional. Ambos siguen a la espera de una resolución judicial sobre el caso, pero por ahora la única ‘sentencia’ que han encontrado es verse apartados de sus cargos en la territorial.