Imagen del campo de fútbol de sa Teulera en el que disputa sus partidos el Alqueria. | FFIB

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Tras unas semanas de tregua desde el parón vivido a mediados de febrero como protesta, la violencia ha vuelto a obligar a la suspensión de un partido en el fútbol balear. El partido entre el Alqueria y el Artà de Regional Preferente fue interrumpido durante la primera parte después de que un jugador visitante agrediera al colegiado del encuentro, que recibió un cabezazo y optó por dar por finalizado el choque correspondiente a la jornada 30 que había sido aplazado en su día y se disputó el pasado miércoles dia 4 en el campo de sa Teulera.

Según consta en el acta del colegiado, el partido fue suspendido en el minuto 36 «por sufrir un cabezazo» por parte de un jugador del Artà cuando el resultado era de 1-0 a favor del Alqueria y tras sacar sendas rojas a un jugador de cada equipo por encararse. «El jugador del club Artà en el minuto 36 estando el juego detenido, una vez expulsado, sigue con las protestas a mi asistente 1, por lo cual me acerco y me interpongo para pedir que cese en sus protestas y abandone el campo. En ese momento dicho jugador en una actitud agresiva y fuera de sí, se encara conmigo a escasos centímetros y dirige a mi diciendo: '¡Qué puta vergüenza!' en repetidas ocasiones, y también haciendo varios amagos de propinarme un cabezazo, no pudiendo yo retroceder estando mi asistente y yo rodeados, por jugadores del Artà. En lo que en uno de sus intentos consigue alcanzarme e impacta su cabeza, con mi ceja izquierda, por lo que decido suspender el partido», relata el documento arbitral al que ha tenido acceso este periódico.

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El colegiado, que precisó asistencia médica y cuenta con un parte de lesiones tras el incidente, también relata en el acta como otro jugador del Artà «una vez nos dirigíamos al túnel de vestuarios, se dirigió hacía nosotros en los siguientes términos 'demasiado poco os pegan'. Además, también refiere que el delegado «vino junto a su entrenador a pedir explicaciones de la suspensión del partido». «Al dar las explicaciones pertinentes y el motivo de la suspensión, dicho delegado se muestra disconforme y se dirige hacia mi persona en los siguientes términos: 'Esto te pasa por no haberlos expulsado a los dos' justificando la agresión de su jugador».

Por su parte, el Artà no se ha quedado de brazos cruzados porque entiende que lo que refleja el acta del encuentro no se ajusta para nada a la realidad. El futbolista en ningún caso agredió al colegiado, según un portavoz del club de ‘ses Pesqueres’, y si bien es cierto que existió ese momento de tensión por una situación concreta que se dio durante el partido, rechaza de forma contundente que el jugador golpeara con su cabeza al árbitro que dirigió el encuentro. Con el fin de defender tanto la honorabilidad del jugador como también del propio club, el Artà ha puesto el asunto en manos de sus abogados al entender que se está incurriendo en «falso testimonio» y acudirán a la justicia ordinaria porque por encima de todo «nos ampara la veracidad de lo sucedido». Si bien una cosa es el castigo federativo que le pueda imponer el Comité, la entidad no quiere que esta «injusticia» como la califican lastre el nombre de un futbolista que si por algo se ha caracterizado durante su etapa como deportista ha sido en la deportividad que ha exhibido durante los muchos años que lleva en el fútbol activo. Además, presentará como pruebas de que no existió tal agresión al árbitro, testimonios tanto del propio club como también del equipo rival y asegura que el motivo para suspender el partido El Artà niega la agresión y asegura que el motivo de la suspensión fue «para poder ver el gran partido de Liga de Campeones del miércoles».