Iratxe Pérez te explica en la sección 'Cajón de sastre' de ultimahora.es cómo afecta la calefacción a la salud de nuestras mascotas. | M. Coeto

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La borrasca Blas ha traído un importante descenso de las temperaturas que ha provocado que en muchos hogares ya haya vuelto a poner la calefacción. Aunque los aires acondicionados o los radiadores nos permiten calentar las habitaciones de nuestra casa cuando el frío aprieta, debemos tener en cuenta que su uso puede afectar a la salud de nuestras mascotas.

En el vídeo que acompaña a esta información te explico de forma detallada el efecto que produce la calefacción sobre los perros y los gatos. Además, te detallo una serie de pautas que te ayudarán a que tu mascota mantenga una correcta temperatura corporal.

A la hora de usar la calefacción, debes tener en cuenta que la temperatura ideal para calentar un hogar oscila entre los 19 y los 21 grados durante el día, y los 15 y los 17 durante la noche. Antonio Ruiz, de la empresa de climatización TSC Instalaciones, señala que «cada grado que subimos supone pagar más en la factura de la luz». Y es que, tal y como indica, cada grado extra conlleva un encarecimiento del 7% en el recibo de la luz.

Pero no solo basta con tener un buen climatizado. Para que nuestra casa tenga la temperatura adecuada, debemos prestar especial atención a los siguientes puntos:

- Comprueba que las ventanas se cierren bien, a ser posible con cierre hermético y doble cristal. Respecto a las paredes y los techos hay materiales como el poliestireno o paneles de fibra de madera que ayudan a mantener la temperatura del hogar.

- Enciende la calefacción por espacios, cerrando las puertas en las zonas en las que no vayas a estar. De este modo se evita malgastar energía y dinero.

- Utiliza dispositivos para programar la calefacción. Así se encenderá automáticamente antes de que llegues a casa y evitarás los cambios bruscos de temperatura.

- Evita cubrir los radiadores y poner ropa húmeda sobre ellos para que se seque, ya que funcionan por convección y su calor va de abajo a arriba. Además, antes del primer uso se deben purgar.