El diputado de UPyD y actor Toni Cantó (izq.), en un fotograma de la película 'La partida'.

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Toni Cantó regresa al cine en «La partida», en el que interpreta a un turista sexual gay, con escena de cama y desnudo incluidos. «Soy consciente de que vivo en una sociedad en la que puede escandalizar más que un diputado enseñe el culo a que un diputado robe o cobre en dinero negro», asegura.

Por primera vez desde que asumió el acta de diputado en el Congreso, Toni Cantó regresa a la gran pantalla con esta película dirigida por Antonio Hens, rodada en Cuba y que llega este fin de semana a los cines.

Cantó se fue a rodar a Cuba en el verano de 2011, unos meses antes de las elecciones generales en las que se presentó en las listas de UPyD, pero tiene claro que habría rodado las mismas escenas siendo diputado.

«La complicación habría sido ir a rodar a La Habana, pero si la pregunta es si hubiese estado dispuesto a hacer un personaje gay con escena de cama siendo diputado, la respuesta es que sí», afirma a Efe el actor valenciano, ajeno a los comentarios y suspicacias que pueda levantar.

«Yo me siento bajo lupa, no por esta película sino a diario. Conmigo hay una especial atención y por tanto no va a cambiar nada, será un día más como otro cualquiera de mi vida», señala. «No estoy muy pendiente de los comentarios, estoy todo el día encerrado, vivo en el Congreso», añade Cantó tras la rueda de prensa de presentación de la película.

Sobre la experiencia del rodaje, asegura que fue muy buena. «Frente a todos los topicazos que se nos cuentan aquí, sobre todo desde la izquierda, conocer la realidad de primera mano fue un privilegio», apunta.

«Llevaré siempre en el corazón esas dos semanas, el contacto con una ciudadanía que está muy maltratada y muy harta, viviendo en una situación bastante desesperada», añade.

«La Partida» cuenta la historia de una pareja de adolescentes, homosexuales y apasionados del fútbol, que deben superar sus propios prejuicios y miedos, y los de la sociedad en la que viven, para vivir su historia de amor, y que también se dedican esporádicamente a la prostitución.

Pese a la dificultad de compaginar el arte con su carrera política, Toni Cantó confía en poder seguir haciéndolo de alguna manera y, de hecho, está escribiendo una obra de teatro «con contenido político» que espera poder estrenar hacia fin de año.

«Espero que esta no sea la única excepción porque necesito expresar mi lado artístico. Sino me voy a volver un poco loco», comenta.

«Me siento sobre todo actor. Soy sociedad civil aportando mi granito de arena temporalmente a un proyecto político, intentando mejorar humildemente, dentro de mis posibilidades, la situación de mi país. Por eso me presenté y porque creo en lo que hago, pero es algo temporal», subraya.