Pep Alemany, Manuel de la Osa, Antònia Alemany con la pequeña Arancha, César Fernández, Laura Benítez, Diego Hidalgo, Dani Ferrer, Magdalena Vidal, Cristian Pérez y Sofía, Gabriel Servera y Ana Carreras. | Curro Viera

TW
0

El Sopar a la Fresca de las Festes des Vermar de Binissalem es más que una simple fiesta. Cada año crece y son más las personas que, desde cualquier punto de la Isla se desplazan a este pueblo y gracias a la hospitalidad de amigos, llenan sus calles. Buena cuenta de ello dan los kilométricos atascos que se viven en cada edición y que este año fueron especialmente grandes, principalmente por la huelga que se llevó a cabo por los trabajadores del tren y que propició que los desplazamientos en coche fueran muy superiores a lo habitual. La amenaza de lluvia no pareció detener a nadie y finalmente unas 20.000 personas disfrutaron de los fideus de vermar , buen vino de la tierra y otras viandas típicas de estas fiestas. Si tenemos en cuenta que la población de Binissalem ronda los 8.000 habitantes, las cuentas hablan muy bien de la hospitalidad de este pueblo, que año tras año organiza unas de las mejores fiestas de la Isla.