Elena Blázquez, Tomeu Quetglas, Sebastiana Oliver, Maria Antònia Oliver y Sebastià Rosselló. | Curro Viera

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La distinción Manto Negro d’Argent tiene como propósito reconocer la labor de personas que tanto desde dentro del mundo del vino como desde alguno de sus aspectos relacionados hayan contribuido a la popularización y desarrollo de esta cultura. En su quinta edición, celebrada el pasado sábado 7, el acto de entrega salió por vez primera a la Part Forana. De entre todos los cellers pertenecientes a esta DO interesados en organizar el evento, la suerte quiso que fuera Vins Nadal, de Binissalem, el elegido. Las dos personas que recibieron el broche y el diploma acreditativo fueron la cocineraMaria Solivellasy el ingeniero agrónomoPere Quetglas. Solivellas es una conocida defensora de las tradiciones sostenibles, que promueve desde su restaurante. Quetglas, por su parte, jugó un papel imprescindible en la creación y consolidación de esta DO. En sus palabras subrayó que si antes este vino era ignorado, por fin ahora es un imprescindible en las cartas.