El detenido, junto a un guardia civil, el jueves en los juzgados de Palma. | Alejandro Sepúlveda

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Dice la leyenda en Fuentealbilla que si haces felices a 48 millones de personas se te concede lo que quieras... pero Andrés, hijo, pide algo más...

Vamos, vamos... tiqui-taca, tiqui-taca. Venga, Kalise para todos.

El futbolista Andrés Iniesta protagonizó un anuncio para una marca de helados después de ganar el Mundial de Sudáfrica con la Selección Española en 2010. Algo parecido debió pensar un joven dominicano de 28 años tras quedarse con la tarjeta de la gasolinera BP Plus de su anterior empresa de construcción, en Santa Ponsa, e invitar a gasolina a un puñado de amigos durante casi tres meses:

Venga, vamos... gasolina (gratis) para todos... tiqui-taca.

La Guardia Civil de Calvià abrió una investigación tras recibir la denuncia del responsable de la empresa a mediados del pasado diciembre y este jueves detuvo al hombre como presunto autor de un delito de estafa continuada. El arrestado pasó a disposición judicial en Vía Alemania, el mismo día por la tarde, y quedó en libertad con la obligación de comparecer el día 1 de cada mes en los juzgados.

La víctima denunció que la tarjeta que utilizó el extrabajador estaba asociada a un vehículo de la empresa, pero no a un empleado concreto. El perjudicado no se percató del extravío de la tarjeta el pasado mes de septiembre debido a que los cobros, al principio, no eran extremadamente altos.

Los meses pasaron y el departamento de contabilidad de la empresa comprobó que los cobros habían aumentado de manera desproporcionada e iniciaron una serie de averiguaciones para tratar de esclarecer quién podría haber utilizado la tarjeta tan a destajo. Sin piedad.

El 12 de diciembre la empresa canceló la tarjeta de crédito para que no se pudieran realizar más pagos. Los agentes que tomaron declaración al responsable de la sociedad le preguntaron si sospechaba de alguien y el hombre no dudó. Dio el apellido de un joven dominicano que había trabajado para la subcontrata que tenían y que fue expulsado de esta.

La víctima adjuntó en su denuncia una serie de extractos bancarios de los cobros realizados desde que se extravió la tarjeta y ascendían a 9.800 euros. La empresa, según explicó, verifica que los trabajadores realizan los pagos correctamente con las tarjetas BP porque adjuntan el ticket de la gasolina repostada.

El perjudicado manifestó que no era la primera vez que ocurrían hechos similares y que en las gasolineras donde se realizaron los pagos hay cámaras de seguridad que servirían para identificar al autor o autores de los pagos. Los agentes de la Guardia Civil abrieron una investigación y descubrieron que el extrabajador detenido se quedó con la tarjeta de la empresa y se la dejaba a sus amigos para que repostaran gasolina en estaciones BP de Llucmajor, Son Oliva o El Amanecer.

El joven dominicano arrestado no hizo felices a 48 millones de personas como Iniesta tras marcar el gol ante Holanda en la final del Mundial de Sudáfrica, pero durante tres meses un grupo de amigos y él repostaron sin pagar un céntimo.

Gasolina (gratis) para todos.

Tiqui-taca.