El acusado, este lunes, en el juicio en Vía Alemania (Palma). | Guillermo Esteban

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Usted tiene 28 páginas de antecedentes. ¿Qué ha hecho con su vida?- preguntó ayer el juez a un hombre que robó en una frutería de Palma.

-Poca cosa...

-¿Qué ha hecho antes de entrar en prisión?

-Yo era encofrador y también fui mozo de almacén en el antiguo supermercado Gigante...

-¿Por qué cometió tantos delitos?

-Para drogarme.

El delito por el que fue juzgado el hombre fue un robo con fuerza en una frutería de la calle Sant Vicenç de Paül, en Palma, el pasado 17 de mayo de 2023. El acusado, que se encuentra en prisión desde entonces, reconoció ante el juez que fracturó el cristal del establecimiento y se apropió de 100 euros que había en la caja registradora. Aseguró que lo hizo por su grave adicción a la cocaína, pero el fiscal considera que no ha quedado demostrado que actuara por su drogadicción.

"Dejé de acudir a Proyecto Hombre hará seis o siete meses por falta de motivación. No me motivaba estar allí y tampoco tenía el apoyo de mi familia", explicó el encausado, ayer, en el juicio en Vía Alemania.

-¿Qué hizo con los 100 euros que robó esa noche?

-Consumir cocaína.

Un agente de la Policía Nacional que detuvo al delincuente comentó que ya había entrado a robar en la misma frutería con anterioridad. Los investigadores revisaron las grabaciones de las cámaras de seguridad del establecimiento y localizaron al sospechoso en el albergue Ca l'Ardíaca. "Yo no sé si consume o no, pero por su físico parece que sí".

El juicio se celebró para discutir la circunstancia atenuante de toxifrenia. Su abogado sostuvo en su informe que el hombre actuó por su adicción a las drogas y solicitó una pena de dos años de cárcel. El fiscal, por su parte, indicó que no hay ningún informe médico de esas fechas que acredite esa situación de drogodependencia y pidió que se le imponga una condena de cuatro años de cárcel.

El enjuiciado aprovechó el turno de la última palabra para pedir perdón al propietario de la frutería.