Los dos médicos imputados, durante una de las sesiones del juicio. | Alejandro Sepúlveda

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Visto para sentencia. El juicio contra el cirujano y el anestesista por la liposucción mortal a Fátima Cherkaoui finalizó este lunes tras cuatro maratonianas sesiones repartidas en varias semanas. En el trámite de conclusiones la representante del Ministerio Fiscal consideró que los dos acusados llevaron a cabo un comportamiento descuidado y actuaron de manera negligente y mantiene la petición de tres años de prisión para cada uno de ellos por un homicidio imprudente.

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Las defensas de ambos procesados solicitaron la absolución. El abogado Jaime Campaner, que defiende los intereses del cirujano, explicó en su informe que lo sucedido no fue más que «una desgracia, un accidente». Los dos imputados mantuvieron su inocencia en la primera sesión. «No se hizo nada diferente a lo que había hecho en las centenares de operaciones que he realizado en mi carrera», dijo el cirujano.

Además de los tres años de prisión, la acusación pública también solicita que los médicos indemnicen a los hijos de la fallecida con 240.000 euros.