Parte del material incautado a los ladrones. | Guardia Civil

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Cinco jóvenes, tres chicos y dos chicas, todos ellos de nacionalidad española, se enfrentan a penas que suman en total 26 años de cárcel por una oleada de robos en apenas cinco meses –de junio a noviembre de 2020– que tuvo como epicentro el municipio de Calvià y las peluquerías, donde actuaron en siete de los quince robos que les imputa el Ministerio Público. El juicio por estos hechos está previsto que se celebre próximamente en una sala de lo Penal de los juzgados de Vía Alemania, en Palma.

Según el escrito de acusación pública, el modus operandi de la banda era casi siempre el mismo: actuaban de madrugada y forzaban la entrada de los negocios para apoderarse del material que encontraban dentro y también de dinero en efectivo. La voraz actividad de los cinco jóvenes empezó el 28 de junio de 2020. Ese día fracturaron el bombín de la puerta de una peluquería de Santa Ponça y se hicieron con productos y distintas cantidades económicas. Allí volverían a repetir el robo el 14 de septiembre.

Entre el 5 y el 31 de agosto, según la Fiscalía, cometieron sus fechorías en bares, restaurantes, establecimientos de comida rápida y, por supuesto, en peluquerías de Son Ferrer, Magaluf, Palmanova, Peguera y en el municipio colindante de Andratx. En septiembre siguieron con su actividad delictiva en Calvià. El robo más alejado de su zona de acción que se le imputa es uno en Binissalem, llevado a cabo el 12 de septiembre y no de madrugada, sino a primera hora de la tarde. El último delito del que se les acusa ocurrió el 23 de noviembre en El Toro.

Tras una intensa investigación de la Guardia Civil, cuatro de los cinco sospechosos fueron arrestados el pasado 15 de enero. La quinta en discordia fue apresada el pasado mes de agosto. Los tres chicos ingresaron en prisión, que fueron abandonando progresivamente. Tal y como sostiene el Ministerio Fiscal, ellos eran los encargados de los robos y las dos chicas almacenaban en sus domicilios el botín que conseguían los jóvenes. Y una de ellas, además, facilitó la actuación dejándoles su vehículo, que utilizaron en la mayoría de ocasiones.