Las quemaduras.

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Un trabajador de mediana edad ha sufrido quemaduras de segundo grado en un pie después de que una botella con ácido le volcara sobre la bota de seguridad y el líquido se colara por la lengüeta.

Los hechos ocurrieron hace unos días en una nave industrial del polígono de Son Castelló, donde el empleado estaba trabajando con unos coches que debían ser entregados.

Ácido

En un momento dado, el ácido que utilizan para las llantas volcó sobre una de sus botas, pero el operario pensó que sólo el exterior del zapato había resultado afectado. En realidad, parte del líquido corrosivo le había llegado ya al pie y cuando el hombre llegó a su casa descubrió unas graves quemaduras.

Acudió rápidamente hasta la Mutua Balear, en Palma, donde le dieron la baja por quemaduras de segundo grado, que pueden tardar bastantes semanas en curar por completo.