Daniel, de 12 años, se recupera en Son Espases. | IMAGEN CEDIDA POR LA FAMILIA

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Nicanor, María José y, sobre todo, Daniel, su hijo de 12 años, aún siguen con el susto el cuerpo. El menor fue atropellado el pasado viernes por la tarde en Son Caliu, en Calvià, por un conductor que se dio a la fuga. El chico se recupera en el hospital de Son Espases después de ser operado de una doble fractura de húmero y de una rotura de pelvis. A día de hoy sólo saben que el autor del siniestro conducía un coche gris.

El padre pidió ayuda a través de Facebook y su publicación ya ha sido compartida por centenares de personas. «Lo único que queremos saber es quién atropelló a nuestro hijo», asegura a Ultima Hora el progenitor del joven herido.

Balón

Daniel Morillas y un amigo regresaban a casa la tarde del viernes después de jugar a fútbol en las instalaciones que hay entre dos supermercados, el Lidl y el Aldi. Eran alrededor de las 17.30 horas. «En un momento dado se le cayó el balón a la carretera y fue a por él. Miró que venía un coche a lo lejos y, como le daba tiempo, decidió cogerlo. Al volver a levantar la cabeza, ya tenía el vehículo encima», relata Nicanor. Daniel, a pesar del fuerte golpe recibido, pudo reponerse con ayuda de su amigo y vieron como el vehículo siguió su trayectoria y frenó unos metros más adelante. El conductor se apeó del coche, les miró y continuó la marcha. En ese momento el miedo se apoderó de los dos menores y sólo se les ocurrió marcharse a casa. Los dos niños apenas podían recordar que el coche era gris y con eso trabaja la policía.

«El niño llegó a casa con el brazo colgando, sin una zapatilla y lleno de sangre. Fue mi mujer quien le abrió la puerta y se quedó en estado de shock», explica angustiado el progenitor. La madre, presa de los nervios, no pudo ni avisar a emergencias sino que llamó directamente a su marido. Este avisó al 112 y en unos pocos minutos se presentaron en la vivienda una ambulancia y agentes de la Policía Local de Calvià. Tras una rápida exploración del menor, y viendo la gravedad de la heridas, fue trasladado a Son Espases, donde fue operado el día siguiente. Ahora Daniel se recupera de las heridas y de las contusiones que tiene por todo el cuerpo. Y, como es normal, no puede olvidar lo que le ocurrió. «Dice que no quiere volver a salir a la calle», apunta apenado Nicanor. El propio padre reflexiona acerca de lo que hizo el varón que atropelló a su hijo. «No sé cómo se puede golpear a alguien con tu propio coche y seguir la marcha como si nada; yo no podría dormir bien». La familia, que espera que el niño pueda abandonar el hospital pronto, confía en que el conductor se entregue a la policía. «Lo que más nos duele es que no se preocupó por ver qué le había hecho al niño, sólo le miró de lejos, vio como se incorporaba y volvió a acelerar; es momento de que acuda a la policía y explique lo que pasó», subraya.

La Policía Local de Calvià está revisando las cámaras de seguridad de la zona, incluidas las de los supermercados cercanos, para tratar de identificar el coche gris que atropelló a Daniel. También, y como suele ocurrir en estos casos, han sido avisados los talleres de los alrededores por si alguien con un coche de color gris acude con la aleta lateral delantera dañada para reparar.

Lugar donde ocurrió el atropello el pasado viernes. Foto: J.P.MARTÍNEZ

La familia quiere concienciar al conductor del daño que provocó

La familia de Daniel pidió a Ultima Hora que publicara la fotografía del niño hospitalizado y con la cara descubierta para concienciar al conductor fugado del daño que provocó el pasado viernes. También quieren resaltar el trato que reciben desde que el niño ingresó en Son Espases. «Todo el personal nos está tratando de maravilla», apunta el padre, muy agradecido por las atenciones.