El acusado, un hombre de 35 años y nacionalidad española, admitió los hechos en el juzgado de lo Penal número 4 de Vía Alemania y aceptó como condena el pago de una multa de 990 euros y la retirada de carnet durante los dos próximos años y medio tras un acuerdo de conformidad.
Velocidad excesiva
La versión del ministerio público, y dada por buena por el acusado, es que el condenado circulaba a velocidad excesiva y perdió el control de su vehículo. Todo ello tras haber ingerido importantes cantidades de alcohol previamente y que le hicieron perder reflejos y facultades de reacción al volante.
Poco después del accidente, el hombre fue sometido a la prueba de alcoholemia y arrojó un resultado de 0,53 y 0,51 de alcohol por litro de aire espirado, es decir, duplicó la tasa permitida. Asimismo el varón renunció a la prueba de análisis sanguíneo.
Debido al impacto del vehículo del acusado con el coche patrulla, los dos agentes que lo ocupaban sufrieron heridas de diversa consideración. Uno de ellos padeció policontusiones y cervicalgia postraumática y tuvo que pasar por quirófano. Le ha quedado como secuela dolores crónicos en la zona cervical. Su compañero también sufrió heridas en las cervicales, tardando en recuperarse más de dos meses.
En un principio la Fiscalía solicitaba para el acusado, que no contaba con antecedentes penales, una pena de medio año de cárcel y la privación del derecho a conducir vehículos a motor durante tres años. Finalmente la pena quedó en una de 990 euros y la retirada del carnet durante dos años y medio.
El seguro se hace cargo de las indemnizaciones a los agentes heridos
Durante la vista celebrada este miércoles en Vía Alemania se dio a conocer que el seguro del condenado, autor de un delito de lesiones por imprudencia grave, se ha hecho cargo de manera íntegra de las indemnizaciones que solicitaba el abogado de los dos policías locales de Palma que resultaron heridos tras la imprudencia del acusado, que conducía bebido y se saltó un semáforo en rojo. La compañia aseguradora del imputado ha abonado 4103 euros a un agente y 4160 al otro por las lesiones ocasionadas y por las secuelas.
4 comentarios
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Encima con puntería.
Se ve que no había otro lugar donde estrellarse. En cierto modo podemos considerar que el individuo se entregó solito a las autoridades.
Quiero creer que como en muchos otros casos semejantes, poniédole una letra M en el cristal trasero del automóvil, este accidente sd hubiera evitado. Ridiculeces a manos llenas.
Y esto es una condena?