En el grupo intervienen tres antiguos agentes del Grupo de Blanqueo. | Alejandro Sepúlveda

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La defensa de Bartolomé Sbert, antiguo ‘número dos’ del Grupo Cursach, ha presentado un escrito para acceder de «forma urgente» a la totalidad de los mensajes de WhatsApp intercambiados entre el juez Manuel Penalva, el fiscal Miguel Ángel Subirán y los agentes del Grupo de Blanqueo de la Policía Nacional. El abogado de Sbert, Antonio Martínez, registró el escrito después de que el juez Miquel Florit vedara el acceso de las acusaciones particulares en la pieza abierta por los mensajes al todos los chats que reconstruyó la policía del móvil de uno de los agentes. «La sensación es que pretende ocultársenos información de interés», señala.

El magistrado y la Fiscalía se opusieron a entregar de forma íntegra todos los mensajes. El ministerio público argumentaba que era necesario un cribado previo para impedir la difusión de mensajes privados o que no tuvieran relación con los hechos investigados.

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El escrito de la acusación particular rechaza ese argumento y señala que lo que pretende es acceder a los grupos que ya habían sido señalados por la policía como de interés para las investigaciones, sobre todo insiste en el que estaban presentes el juez, el fiscal y los tres policías: «Era un grupo de trabajo en el que no cabía privacidad, todo lo que se vertía en el mismo era trabajo y guarda íntima relación con el caso». Sobre las demás conversaciones considera que también son de interés.

El letrado reclama de la administración de justicia transparencia y agilidad: «El ocultamiento de las diligencias favorece el descrédito y la confianza». En concreto, carga contra la Fiscalía Anticorrupción: «Confiábamos en que actuaría de forma ejemplar, impulsando una investigación profunda en busca de la verdad ante la constatación de que uno de sus representantes habría formado parte del presunto grupo criminal».