A la 1.57 horas de la madrugada de este domingo, varias llamadas alertaron a los equipos de emergencia del incendio declarado en una nave de la calle Gremi Porgadors.
Rápidamente, numerosas patrullas de la Policía Local de Palma se desplazaron hasta el lugar para recabar información sobre lo sucedido. Simultáneamente, los Bombers de Palma se hicieron cargo de la extinción del fuego. Por fortuna, el incendio fue atajado a tiempo y no hubo que lamentar daños de consideración.
Investigación
A partir de ese instante se inició una exhaustiva investigación de lo sucedido. Según información policial, el lugar donde se produjo el incidente es conocido porque suele congregarse una gran cantidad de jóvenes todos los fines de semana y vísperas de festivos para consumir alcohol.
De hecho, la zona lleva años siendo uno de los puntos neurálgicos del polígono para realizar botellones.
Los agentes responsables del caso se entrevistaron con algunos testigos presenciales de los hechos y les tomaron declaración. Todos ellos coincidieron en señalar a un grupo de jóvenes -de entre 20 y 30 años- como los presuntos autores del disparo de la bengala náutica. Tras ofrecer una descripción de los mismos, facilitar la matrícula y el modelo del coche en el que se habían dado a la fuga, la Policía Local consiguió localizar a los sospechosos y al vehículo pasados unos minutos. Los presuntos autores, que están plenamente identificados, fueron citados por la policía para tomarles declaración en las próximas horas en el cuartel de Sant Ferran de Palma.
Los investigadores quieren aclarar los motivos por los que los chicos realizaron dos disparos de bengala en una zona de gran afluencia de personas y cómo la consiguieron.
Una bengala (también llamada luz de bengala) es un elemento pirotécnico que produce una luz muy brillante o intensa. Se utiliza para señalizar, iluminar, como señal de ayuda o elemento defensivo (contramedidas), y usualmente como elemento para provocar incendios. Su uso está muy restringido y se sospecha que los autores de los disparos puedan ser propietarios o usuarios de algún tipo de embarcación.
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También puede ser sospechoso algún trabajador de una empresa náutica que son los encargados de retirar e inutilizar las caducadas, al no haber ningún control riguroso como lo hay en las armas por ejemplo, prácticamente están al alcance de cualquiera y hay gente que se las lleva a casa para cualquier fiesta y las lanzan sin tener en cuenta que están diseñadas para que caigan al mar y no sobre una casa, un jardín, un bosque, etc....