Imagen del material requisado a los acusados, que les ha sido devuelto.

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Un Juzgado de Instrucción de Palma ha archivado la causa contra una pareja por el presunto robo el pasado mes de marzo de 30.000 a un familiar que sufre una discapacidad.

La víctima, de 53 años, decidió retirar la denuncia hace unas semanas después de que le tomaran declaración tanto a él, como a un testigo, así como a los dos inculpados, su sobrino y la pareja sentimental de este, que en el momento de los hechos vivían con el hombre, que tiene una minusvalía física que le obliga a moverse en silla de ruedas.

La defensa de los dos acusados, ejercida por el letrado Luis Morey, solicitó en ese momento el archivo de la investigación, recibiendo el visto bueno tanto del juez instructor como del Ministerio Fiscal, que a pesar de poder continuar con el caso, optó por dar carpetazo al asunto.

Devolución

Los ya eximputados, una vez archivado el caso, han recibido en los últimos días la devolución de los artículos que les requisaron cuando fueron arrestados. En su momento, la Policía Nacional creyó que los objetos encontrados a nombre de la pareja, que habían sido adquiridos poco después de la denuncia, y entre los que se encontraban dos vehículos, se consiguieron con el dinero desaparecido. Los agentes tuvieron conocimiento que además de los dos coches, también habían comprado un frigorífico, una televisión de 55 pulgadas y habían iniciado un tratamiento dental presupuestado en más de 4.000 euros.

En la vivienda de los acusados también hallaron una cantidad importante de dinero en efectivo. La pareja fue detenida el pasado mes de marzo después de la denuncia interpuesta por el hombre, que despertó en Son Espases sin saber cómo llegó hasta allí, pero tenía una idea de quien había sido.

La víctima relató en aquel momento que su sobrino, que llevaba viviendo con él en su casa desde hacía dos semanas, sabía dónde guardaba el dinero en efectivo en casa, por lo que todas las sospechas se centraron en ese momento en él y en su pareja sentimental.
Con la devolución de los objetos requisados se da por cerrado definitivamente el caso sin haber llegado a juicio.