Todas las mordeduras de estos pequeños mamíferos alados deben ser tratadas. | Pixabay

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Dos casos de posible transmisión de rabia por mordiscos de murciélago se han confirmado en las últimas semanas, uno en Valladolid y el otro en Huelva, según informan varios medios de ámbito nacional y estatal.

El primero tuvo lugar cuando una mujer abrió un armario de su casa y uno de estos pequeños mamíferos alados salió y la mordió. El segundo, en la capital andaluza, sucedió cuando un joven se percató de que su mascota jugueteaba con un murciélago, y cuando fue a retirárselo resultó mordido.

Es sorprendente la proximidad de ambos casos, ya que desde finales de los 80 solo se habían descrito una quincena de episodios de este tipo. Según las autoridades sanitarias una mordedura de murciélago debe ser siempre tratada puesto que pueden transmitir una enfermedad que, en caso de desarrollarse, tiene una mortalidad cercana al 100 por cien de los casos.

Afortunadamente los mordidos acudieron rápidamente al médico, donde se les limpió la herida y administró un tratamiento acorde a su situación.

De hecho, los expertos recomiendan que, en caso de ser mordido por un murciélago se lave de inmediato la zona con agua y jabón y se acuda a un punto de atención médica lo antes posible. Del mismo modo, conviene prevenir a los niños para que no toquen a estos animales.