Toxicómanos, prostitutas, delincuentes y mendigos toman el clausurado centro de ancianos de sa Nostra, en General Riera | Alejandro Sepúlveda

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De residencia de ancianos a hotel de la delincuencia. El antiguo edificio para mayores de sa Nostra, en la calle General Riera, ha sido tomado por delincuentes, toxicómanos, mendigos y prostitutas, que han aprovechado que las instalaciones están cerradas. La situación ha disparado la inseguridad en la zona y los vecinos denuncian robos, sustos y que «por las noches da miedo pasear por estas calles».

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La crisis trajo el cierre de la residencia de mayores de General Riera, pero de un tiempo a esta parte se ha abierto un agujero en la parte trasera y el trasiego de marginados es continuo. La presencia de los excluidos ha disparado la inseguridad y también los robos y pequeños hurtos.

A los nuevos inquilinos de la antigua residencia de sa Nostra le tapiaron la entrada que utilizaban para acceder al edificio, pero han abierto una nueva y campan a sus anchas. Los jardines de la vieja residencia presentan un aspecto deplorable y desde allí, a través de un agujero en la verja, entran los toxicómanos y prostitutas. Hace unos días, la policía tuvo que intervenir porque una menor iba a saltar al vacío desde uno de los pisos, para suicidarse. La heroica actuación de un agente lo evitó.