Un tripulante de un velero que salió ayer por la mañana del Port d'Andratx con destino a Eivissa permanece desaparecido después de que cayera al mar a unas 20 millas al suroeste del islote de sa Dragonera. El náufrago no llevaba chaleco salvavidas y parece ser que la causa del accidente fue el fuerte temporal que azotó ayer el mar, con olas de hasta cinco metros.
La embarcación, ocupada por cuatro tripulantes extranjeros, navegaba entre grandes olas cuando un golpe de mar, al parecer, lanzó por la borda a uno de ellos. Sus compañeros contactaron con Salvamento Marítimo y con los equipos de emergencia y se puso en marcha un dispositivo de búsqueda que continuará hoy. Dos barcos mercantes, entre ellos el «Murillo», fueron avisados del accidente por si en su trayecto divisaban al náufrago. Salvamar Acrux, con base en Portals, también se hizo a la mar en busca del tripulante, apoyado por un helicóptero del mismo organismo, que había despegado de Valencia, y un avión del SAR. La visibilidad en la zona era muy limitada y las olas de entre cuatro y cinco metros, lo que unido al hecho de que el náufrago no llevaba el chaleco salvavidas deja poco margen para el optimismo.
Los otros tres tripulantes, que según los primeros datos son de nacionalidad alemana, se encontraban en perfecto estado, pero muy afectados anímicamente por lo ocurrido. Cuando dos embarcaciones de Salvamento Marítimo se acercaron a ellos apenas pudieron aportar detalles sobre el accidente y algunos estaban completamente bloqueados.
Las tareas de búsqueda, por mar y aire, se prolongaron durante todo el día, hasta que la falta de luz solar obligó a los equipos de rescate a regresar a sus bases. Hoy está previsto que se reanuden los trabajos y la Guardia Civil se entrevistará con los tres compañeros del náufrago, para aclarar las circunstancias en las que se produjo la fatal caída al agua.
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