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JOSEP MARIA SASTRE Un tramo de unos quince metros de la carretera que asciende al santuario de Consolació, en Santanyí, se desplomó en la madrugada de ayer hacia el interior de la cantera de sa Creu.

Por fortuna, en el momento del derrumbe no circulaba ningún vehículo por esta vía por la que pasan a diario centenares de turistas en coches y autocares que acuden a visitar el santuario.

La carretera desapareció literalmente desplomándose en el precipicio artificial de unos cincuenta metros originado por la excavación. De hecho, toda la recta de la zona afectada linda con la cantera propiedad del regidor de UM de la localidad, Gabriel Vidal.

La carretera permanecerá cerrada al tráfico durante muchos días puesto que las labores de reconstrucción se antojan arto complicadas por el peligro de nuevos desplomes y por la dificultad a la hora de acceder a la zona afectada para realizar las obras. Sin embargo, se ha habilitado un acceso alternativo.

El desplome fue detectado sobre las siete y media de la mañana por lo empleados de la misma empresa de extracción de grava, que avisaron al Ajuntament y colaboraron en el acordonamiento de la zona.

El Ajuntament de Santanyí abrirá una investigación para esclarecer las causas que han provocado el derrumbe y tomará las medidas legales oportunas. Las primeras hipótesis apuntan a que el derrumbe fue causado por las lluvias caídas estos días unido a la actividad que se lleva a cabo en la gravera.

Por otra parte, el Ajuntament informa que el concierto que estaba previsto para esta noche en el santuario de Consolació, se celebrará finalmente en el Teatre Principal de Santanyí. Al lugar del accidente se desplazaron patrullas de la Policía Local, de la Guardua Civil y técnicos del Ajuntament que efectuaron una primera inspección ocular, para esclarecder las causas de lo ocurrido.