Los agentes se encontraron con un coche marca «Jaguar», de color blanco, empotrado en una pared. El vehículo tenía las llaves puestas, el motor en marcha, las puertas abiertas y no había nadie en su interior. En el suelo había un revólver marca Low de 38 milímetros, botellas de cerveza, agua, un antifaz tipo gato y un casco semi integral sin visera, además de una jeringuilla y otros efectos personales. Como ya se informó en estas páginas, el vehículo había sido sustraído a las 00:30 horas del mismo día en la calle Fausto Bonafé, en Son Ferriol.
El propietario fue encañonado con el revólver y además del coche el delincuente se llevó otros efectos de valor. Luego de una serie de pesquisas conjuntas entre el Cuerpo Nacional de Policía y Guardia Civil, a las 04:45 horas se localizó al presunto autor de los hechos, quien se había encondidos entre los matorrales. Luego de ser detenido declaró a los policías, entre lágrimas, que es adicto a las drogas y reconoció ser el autor del robo del coche, como también ser el portador del arma.
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