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Más de 700 agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil están ya en Balears para la 'operación Verano'. El despliegue se ha ido efectuando de manera gradual.

Para el alojamiento, la mayoría de agentes lo hacen en un establecimiento hotelero que tiene una especie de convenio con los mandos del CNP.

Entre la mañana del pasado jueves y ayer llegaron a Palma cinco grupos de la Unidad de Intervención Policía, integrado cada grupo por unos 45 agentes. El viernes se incorporaron agentes de la Unidad del Subsuelo y falta sólo por llegar un grupo de la Unidad de Guías Caninos. Desde primeros del presente mes se han ido incorporando 40 alumnos en prácticas y 40 inspectores de la Brigada de Información, entre los que hay tres expertos de la Unidad N.R.B.Q. (Nuclear, Radiológico, Biológico y Químico). También se han desplazado expertos en la desactivación de explosivos.

Por parte de la Guardia Civil, la cifra de agentes es superior a 300. Desde hace días se encuentran en Palma agentes de los Grupos Rurales de Seguridad, de la Policía Judicial, de la Agrupación de Tráfico, técnicos en la desactivación de explosivos (Tedax), guías caninos, agentes que se han incorporado de otras comandancias del Estado, y de la Brigada de Información.

En el caso de la Guardia Civil los agentes desplazados cobran unas dietas (lo mismo ocurre con el CNP), que reciben el nombre específico de IRE. En su caso cada uno resuelve el alojamiento, haciéndolo o bien en grupos que alquilan una vivienda, bien en hoteles, o de otras formas.