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Varios vecinos de la calle Pablo Iglesias de Palma se llevaron un buen susto ayer por la tarde, tras escuchar varias explosiones en un primer piso del número 11. Al lugar se desplazaron rápidamente agentes de la Unidad de Intervención Inmediata de la Policía Local de Palma, además de varias patrullas del Cuerpo Nacional de Policía, que acordonaron parte de la calle como medida preventiva y desalojaron todo el bloque. Uno de los vecinos alertó que en los bajos del edificio se encuentra el almacén de una tienda de pinturas, por lo que la alerta era máxima. Mientras, los Bombers de Palma intentaron entrar en el inmueble, aunque la puerta principal estaba cerrada con varios pasadores de seguridad y se vieron obligados a acceder desde la ventana, mediante una escalera mecánica. Una vez dentro, comprobaron que un pequeño trastero estaba en llamas y que las deflagraciones se debían a varios botes de aerosoles que estaban almacenados en el cuarto. La vivienda se encontraba vacía, ya que sus propietarios se encuentran de vacaciones en Eivissa.