El arma utilizada en el crimen fue un cuchillo de cocina de hoja
estrecha y de unos quince centímetros de longitud, que le introdujo
en su totalidad por la espalda de un golpe certero y que pudo
afectarle al corazón, por lo que la víctima se desangró. La
presunta autora del crimen, identificada como Rosa Enma Copete
Tascón, de 34 años, llamó a las 8.45 horas de la mañana al 091 para
confesar que había matado a su marido y dar cuenta de la dirección
de la vivienda.
Agentes de la policía, entre los que se encontraban el jefe de
Grupo de Investigación y el responsable de la Unidad de Delitos
Especializados, se desplazaron hasta el domicilio de la pareja, en
el tercero izquierda del número 33 de la calle Vetusta, donde
encontraron el cadáver ensangrentado de Eduardo García Alvarez, de
36 años y taxista de profesión.
Después de precintar el piso se inició la búsqueda de la mujer,
y varias horas más tarde fue hallado su cadáver un acantilado de
Cabo Peñas, al que se arrojó con el vehículo familiar.
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