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MARIA PUIGROS/E. LÓPEZ VERDÚ
Un incendio declarado el jueves por la noche afectó gravemente a una ferretería situada en Alcúdia, en cuyo interior se almacenaban diversos productos tóxicos. Parece ser que el incendio se originó alrededor de las 21.00 horas. Apenas unos minutos antes, el propietario abandonó el establecimiento notando que el contador eléctrico estaba algo «caliente», por lo que decidió bajar los diferenciales. A continuación acudió a su casa, y cuando apenas llevaba algunos minutos, un vecino le alertó que una columna de humo salía de la ferretería. Tres vehículos procedentes de los parques de Santa Margalida, Inca y Can Picafort se trasladaron al establecimiento, que mide unos setenta metros de largo por unos diez de ancho y está situado en la calle Pollentia de Alcúdia. Los bomberos tuvieron que actuar con rapidez para extraer del local algunos productos tóxicos, habituales en este tipo de establecimientos, como cloro, insecticidas, pesticidas, plásticos y bombonas de butano. Los bomberos reconocieron sin embargo que todos estos artículos estaban bien almacenados y en lugares cercanos a las salidas, por lo que se pudo evitar cualquier situación de riesgo tóxico. Una ambulancia tuvo que prestar atención sanitaria al cabo de los bomberos por una ligera intoxicación por humo, mientras que el propietario de la ferretería fue trasladado al PAC de Alcúdia, ya que padece una dolencia cardiaca y se encontraba muy nervioso.