La pareja, él mexicano y ella colombiana, viajaba a bordo de un
coche Seat Ibiza de color rojo y con placas de matrícula V-5661-EY.
Estaban pasando unos días de vacaciones en Mallorca y a las 9.50
horas, cuando circulaban por la carretera de Muro a Inca, aconteció
el siniestro.
Según las primeras indagaciones, la que conducía el vehículo era
Marta Joana Ramírez, de 24 años, y poco después del cruce de Llubí
perdió el control y se salió de la calzada por el margen izquierdo.
Chocaron contra una pared de marés y volcaron. El impacto fue muy
violento y Michel Steven, que no llevaba puesto el cinturón de
seguridad, salió despedido hacia la parte trasera del turismo y
medio cuerpo le quedó inerte, suspendido por la ventana
trasera.
La mujer sufrió sólo contusiones de pronóstico leve, pero aquel
espectáculo dantesco le provocó una crisis nerviosa aguda y cuando
la Guardia Civil y los Bomberos llegaron al lugar decía cosas
incoherentes y estaba en estado de 'shock'. Una ambulancia del 061
la evacuó hasta el Hospital de Muro, mientras los agentes de
Tráfico intentaban aclarar las circunstancias del accidente. Los
funcionarios trataron de localizar a testigos presenciales y aún
está por determinar si la conductora se despistó y dio un volantazo
para recuperar el control, con consecuencias fatales.
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