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Un incendio, que pudo tener su origen en el mal funcionamiento de un microondas, provocó la pasada noche la destrucción de un sexto piso de una finca situada en la calle Lope de Vega, en Palma. En el siniestro no hubo que lamentar heridos, sólo daños materiales, pero fue necesario el desalojo de todo el inmueble. El suceso ocurrió sobre las 23.40 horas del domingo.

Fue el vecino del piso superior el que descubrió que se había iniciado un incendio. Este hombre bajó al piso de su vecino y comprobó que, en efecto, se había declarado un incendio, pero que en el inmueble no había nadie. Al lugar del siniestro acudió la Policía Local y de los bomberos de Palma. Los efectivos forzaron la puerta del piso para poder entrar.

Debido a que el fuego se propagaba con rapidez, y las llamas alcanzaron varios metros de altura, los responsables de la extinción ordenaron a los moradores que desalojaran el edificio. El fuego no fue extinguido hasta cuatro horas después de su inicio.

La persona que vive en este piso, como inquilino, es pinchadiscos, por lo que su vivienda estaba repleta de discos. Este material es altamente inflamable, razón por la que se tardó tanto tiempo en sofocar las llamas. Algunos vecinos escucharon como se producían algunas explosiones, por lo que no se descarta que el incendio pudo originarse por una avería en el gas.