TW
0

El juez decano, Pere Barceló, confirmó ayer que los diez juzgados de instrucción de Palma habían recibido el pasado año un total de 100.000 asuntos penales, «una cifra superior a la registrada en 1999», precisó. «El número de delitos presentados en los juzgados de instrucción ha aumentado debido a las guardias, que son cada vez más voluminosas y cada vez hay más detenidos», dijo Barceló, en una rueda de prensa que ofreció ayer en la nueva sede judicial de sa Gerreria.

Uno de los aspectos que más influye para que se registre ese elevado número de asuntos penales es el desarrollo de la temporada turística, donde la población se multiplica, y con ella, la comisión de delitos, según explicó Barceló. En cuanto a las demandas presentadas en los civil, el juez decano explicó que por ahora «no se registra una actividad excesiva». «Todo dependerá de la coyuntura económica, porque si se produce una crisis, los casos (impagados, quiebras, suspensiones de pagos) evidentemente aumentarán, con lo cual, también repercutirá en la Audiencia de Palma», subrayó.

Desde el pasado 1 de enero hasta ahora se han presentado en Palma 1.300 demandas civiles, de las cuales, 1.000 corresponden a antes del día 8, cuando entró en vigor la Ley de Enjuiciamiento Civil, explicó Barceló. Barceló remarcó, con respecto a algunas protestas presentadas por los jueces sobre sus emolumentos, «que están (los jueces) cansados de hacer horas extras y que no se les remunere».

«Muchas sentencias las dictan en su casa, por la tarde, y con la nueva Ley (de Enjuiciamiento Civil), peor todavía. A partir de ahora, los jueces no pondrán poner ninguna sentencia por las mañanas», explicó. El juez decano dijo que los jueces tienen en marcha una reivindicación de aumento salarial.