TW
0

Un hombre llamado Francisco Javier García Moyá reconoció ayer un tribunal que violó a sus dos hijas menores. Esta confesión la realizó en un juicio en Palma, en el que el acusado se enfrentaba a una petición fiscal de 30 años de prisión por dos delitos de agresión sexual. El acusado se conformó en cumplir una condena de diez años y seis meses de prisión. El hombre confesó que abusó de las dos menores durante más de cuatro años. Primero lo hizo con la hija mayor, y después con su hermana. El agresor reconoce que a una de ellas la penetró.