TW
0

Las tres mujeres croatas que el pasado mes de marzo fueron condenadas a 27 años de prisión por delitos de inducción a la prostitución se han marchado de Mallorca, y por tanto en estos momentos se encuentran huidas de la Justicia. Esta sentencia condenatoria la dictó el tribunal de la Sección Primera de la Audiencia de Palma. El fallo del tribunal ordenaba el ingreso inmediato en prisión de las tres condenadas. Sin embargo, el tribunal ha averiguado que las tres mujeres croatas han huido de la Isla, y por ello se ha dictado una orden de búsqueda y captura de las acusadas. Se sospecha, aunque no hay pruebas que lo demuestren, que la organización de la que formaban parte las ha ayudado a salir de Mallorca y a volver a su país.

Branca Sipec, de 24 años, Romana Tensec, de 23 y Nives Moric, de la misma edad, fueron declaradas culpables de varios delitos de detención ilegal y coacción a la prostitución. Igual suerte corrió Stjepan Ostarijas, el único varón del grupo, quien lleva dos años en prisión preventiva, lo que ha impedido que huyera con sus tres compañeras. El tribunal de la Sección Primera dictó contra estas cuatro personas la sentencia más dura que se recuerda de un caso de inducción a la prostitución. Este grupo se dedicaba a captar mujeres en Ucrania y se aprovechaba de su difícil situación económica, para proponerles un trabajo en España. Cuando llegaban al país, las mujeres, convencidas de que trabajarían como camareras, veían como sus esperanzas se truncaban y se veían obligadas a ejercer la prostitución. Stjepan, con la colaboración de las tres mujeres, se encargaba de vigilar a las jóvenes ucranianas y controlaba sus ingresos económicos. Las mujeres trabajaban cada noche en clubes de prostitución de Palma y el resto del día lo pasaban encerradas en un piso, bajo la vigilancia de las tres croatas. Las víctimas eran golpeadas cuando no ganaban el dinero suficiente.