TW
0

Un espectacular incendio destruyó ayer el segundo piso de un edificio de cuatro plantas situado en el número 63 de la calle Faust Bonafé, en la barriada de Son Ferriol. Durante el suceso, ocurrido a primera hora de la mañana de ayer, diez personas resultaron afectadas por el humo. Estas personas fueron atendidas en el lugar de los hechos, salvo una de ellas, una mujer de 65 años de edad, que tuvo que ser trasladada al hospital de Son Dureta al encontrarse mareada, aunque después fue dada de alta. Entre los herido había un niño de corta edad, que se quejaba de problemas respiratorios por la inhalación del humo. Fue suficiente atenderle en el mismo lugar de los hechos por los sanitarios de la ambulancia.

El suceso ocurrió poco antes de las diez de la mañana. El fuego se inició en el segundo piso del edificio. En esta vivienda, que quedó completamente destruida por el efecto de las llamas y del humo, vive un matrimonio y sus dos hijos de corta edad. Un portavoz de los bomberos explicó que se sospecha que el incendio pudo provocarse al jugar con una estufa eléctrica. En concreto se cree que los niños colocaron alguna prenda sobre la estufa y que la misma se incendiara. En pocos minutos el fuego se propagó por las cortinas y después por el resto de la vivienda, sin que ninguno de los moradores pudiera hacer nada, salvo salir del piso para no resultar herido. Los daños son muy importantes, ya que todo quedó destruido por el efecto de las llamas.

El fuego alcanzó gran virulencia. El humo afectó a casi todos los pisos del edificio, pero sobre a los dos que están situados encima del inmueble en el que se inicio el incendio. Los balcones del tercer y cuarto piso del edificio quedaron muy dañados por el humo, si bien en el interior los daños no son graves. Los bomberos y la Policía Local se encargaron de evacuar a todos los vecinos del inmueble, más por precaución que por peligro. Tres personas que viven en el tercer piso tuvieron que ser rescatadas de su casa por el balcón, a través de una escalera mecánica de los bomberos. El resto de vecinos, sin embargo, pudo salir por la escalera del edificio.

El primer piso del edificio también sufrió goteras en el techo por el agua que utilizaron los bomberos para poder sofocar el fuego. Un amplio dispositivo de los bomberos, de la Policía Local, del Cuerpo Nacional de Policía y de sanitarios de las ambulancias actuaron en el suceso. El propietario de la vivienda en la que se inició el suceso afirmó a sus vecinos que contaba con un seguro.