Las autoridades investigan las causas del tiroteo ocurrido el
martes en una escuela de secundaria a las afueras de Denver, donde
dos jóvenes que solían identificarse con el nazismo mataron a 15
personas y luego se suicidaron.
Los sospechosos, Eric Harris, de 18 años, y Dylan Klebold, de
17, que después de la matanza se suicidaron, eran miembros de un
grupo de unos doce estudiantes que se hacían llamar «la mafia de
los abrigos largos» y solían portar la esvástica y mensajes
alusivos al nazismo. El tiroteo indiscriminado ocurrido en la
escuela de Columbine de Littleton, Colorado, tuvo lugar el mismo
día en que se cumplió el 110 aniversario del nacimiento de Adolfo
Hitler. La policía efectuó el martes por la noche una lenta
investigación del suceso, pues no quería remover algunos cadáveres
que aún estaban rodeados de material explosivo, incluidos los de
los sospechosos. Los agentes localizaron 30 bombas.
El grupo al que pertenecían Harris y Klebold está marginado del
resto de los estudiantes, precisamente por sus ideas neonazis.
Estudiantes que sobrevivieron al tiroteo declararon que los
sospechosos, antes de comenzar a disparar, seleccionaron a sus
primeras víctimas, que fueron los miembros de grupos minoritarios y
atletas. Después, al parecer, lanzaron por lo menos una bomba de
fabricación casera y se dedicaron a matar jóvenes que a esa hora,
cerca del mediodía, estaban en la cafetería o en la biblioteca. Uno
de los testigos, el estudiante Byron Kirkland, de 15 años, declaró
al diario «Denver Post» que «iban gritando y gozando mientras
disparaban».
La policía informó de que halló material para elaborar
explosivos en la residencia de los padres de uno de los dos jóvenes
sospechosos. Los cadáveres de nueve muchachos y tres chicas fueron
encontrados en la biblioteca. Un profesor también apareció muerto a
la entrada de la biblioteca.
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