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Más de cinco kilos de hachís intervenido y tres varones detenidos es el resultado de la última operación efectuada por el GIFA (Grupo de Investigación Fiscal y Antidroga) de la Guardia Civil de Palma.

Las diligencias se remontan al pasado mes de enero, cuando la Benemérita sospechó que un individuo, que regenta un bar en Ciutat y al que le constan antecedentes por narcotráfico, se dedicaba a introducir cantidades importantes de hachís en la Isla. Los agentes antidroga lo sometieron a una estricta y discreta vigilancia y constataron que contactaba con otros sujetos, también «fichados». El varón que le facilitaba la droga era, presuntamente, un vecino de la urbanización de Bahía Grande llamado Manuel M.F., que llevaba un alto nivel de vida que no se correspondía con sus ingresos.

Así las cosas, el pasado día 9 Bernardino C.C., de 38 años, fue arrestado tras apearse del coche del primero, de gran cilindrada. Portaba una bolsa que contenía 5 kilos de resina de hachís. Esa misma tarde fue interceptado el hermano de Bernardino, llamado Vicente, de 43 años, y a las diez de la mañana del día siguiente la operación finalizó con la detención de Manuel, al que además le intervinieron una balanza electrónica de precisión. En un registro domiciliario posterior se hallaron otros 90 gramos de hachís.